Jesús Cámara Olalla

Maestro jubilado

PREGÓN DE FIESTAS DE CANICOSA
La Virgen y San Roque 2017

Canicosos, paisanos y forasteros, de parte del Señor Alcalde se hace saber que hoy se inician las fiestas en honor de La Virgen y San Roque con gran expectación del pasado, presente y futuro.

 
Los aquí congregados en esta tarde-noche, sabed, que somos herederos desde hace 2500 años de los pelendones, celtas pobladores del castro de Peña la Mina, y desde hace 1.000 de la Canicosa que nació a la historia… que en su expansión, a base de una economía ganadera y forestal, tuvo su auge demográfico en los años 50 y 60 del siglo XX en los que su población llegó a los 1.000 habitantes, cifra redonda. Pero como en esta época en los pueblos no había más que necesidad, la gente se fue a donde le daban la teta. En estas fechas comenzó la tremenda emigración en lo que hoy llaman la Serranía Celtibérica o la Laponia del Sur. En muy pocos años vació pueblos y campos para multiplicar la población de las grandes ciudades. Su densidad hoy está por debajo de 10 habitantes por kilómetro cuadrado, por lo que se considera un desierto demográfico, añadiendo las circunstancias adversas de terreno montañoso y ausencia de ciudades de 50.000 habitantes a menos de 50 km.

 
La angustia de los maestros de estos pueblos fue el ver que sus alumnos, los buenos y los no buenos, eran captados por el mundo urbano porque los padres y los mismos maestros les habían dicho: Estudiad mucho e iros.

No es ajena a esta emigración Canicosa que en el padrón de diciembre último figuraban 489 habitantes, hoy posiblemente seamos algunos menos. La cifra está sobredimensionada ya que sólo unos 350 residen en el pueblo más de seis meses. Sesenta vecinos no llegan a los 30 años y 137 sobrepasan los 70. La edad media del canicoso, 57 años. Y cuántos nacen… y cuántos mueren… Estamos envejecidos, no hay relevo generacional, la baja natalidad y la escasez de puestos de trabajo son las causas de este tumor que es la despoblación. ¿Se está convirtiendo Canicosa en un geriátrico? Somos uno de los 157 pueblos de la provincia de Burgos con menos de 500 habitantes. La mitad de estos municipios están en riesgo de extinción.

La vida en el pueblo se ha mitificado. Se ha asociado a un paraíso donde el sosiego, la naturaleza y la autenticidad humana se cruzan en el camino con la senda tortuosa del olvido, el desarraigo y la modernidad. Para algún urbanita el pueblo es como un pequeño parque de atracciones donde pone pie el fin de semana y sentencia: “Aquí sí que se vive bien”… Y a las veinticuatro horas sale corriendo de vuelta a la ciudad.

La pura realidad de Canicosa está en el invierno donde sus calles están desiertas en muchas mañanas con unas heladas que hacen temblar al cielo y con temperaturas bajo cero durante el día. A las nueve de la mañana humean los secaderos de la fábrica de madera a donde se dirigen embutidos en sus buzos sus trabajadores. No tardarán mucho en aparecer un renqueante y despacioso vecino que se desplaza desde el barrio San Roque al otro extremo del Manzanares para alimentar a sus gallinas y un pensionista de la residencia de ancianos que en el sin dormir se da una vuelta mañanera por el pueblo. Cerca de las diez un coche conducido por una madre se acerca a las escuelas para dejar a sus hijos. Hacen fila los niños para entrar en la escuela: dieciséis. Dos trabajadoras de la dependencia hacen la travesía para llamar a sendas puertas. Está abierto el supermercado donde aprovechando el viaje hacen la compra las mujeres a la salida de la misa de 10 y media de D. Abilio. Sobre las 11 comienzan a acudir a la consulta de la médica los jubilados del Sintrom y allí comentan que pronto nevará porque les duele el brazo. El panadero va despertando con su bocina a los que se les ha pegado las mantas. En la casa grande, el ayuntamiento, entra un jubilado a firmar para pasar tres meses fuera del pueblo. Al alguacil se le ve preparando la pala del coche municipal para quitar la nieve de las calles en la nevada que se avecina. La cartera a paso ligero da los buenos días a los lejos agitando la mano. El pitido de una grúa Manitou marcha atrás se oye en la calle de al lado. Un todo terreno arrastra un remolque con pacas de hierba. A las dos y media bajan del autobús los 15 jóvenes que estudian en el instituto de Quintanar. Dormita el pueblo viendo el telediario a la tres de la tarde. No se perderán la partida de cartas los manomanistas del guiñote en el bar Cabrero con espectadores que jalearán las meteduras de pata de uno y de otro. A media tarde tocan las campanas a “muerto”… y la congoja araña las entrañas de sus vecinos. La plaza está desierta, sin un niño. A las seis ya es de noche. Las mujeres bajan a las siete en punto a jugar a la brisca en el Centro Día que abandonarán puntualmente a las nueve. Han dejado en la barra del bar a tres vecinos junto al maestro tomando un vino. Cuando vuelven a casa en una bocacalle se topan con el coche de la guardia civil con sus luces azules haciendo la patrulla. El silbido del viento en la noche, el ladrido de un perro, las pisadas a deshoras de un incógnito vecino, el derrapaje de un coche… Silencio… mucho silencio.

La cantautora María Ostiz ponía esta letra a una de sus canciones:

Pocos quieren permanecer en los pueblos que han sido el símbolo de la estrechez, el abandono y la miseria. Sobre muchos cae la lluvia amarilla del otoño, de la vejez, de la soledad... Los últimos vecinos que vivieron de trabajar en el pinar son ya octogenarios o nonagenarios. «Soportan los días, uno tras otro, todos iguales; dan por vivida su vida». Su capacidad de resistencia y de lucha ante las escaseces económicas son cualidades de estos hombres y mujeres, que temen ser aquejados en sus últimos días de súbito alzhéimer o demencia senil… como algún congénere. ¡Bienaventurados ellos que disfrutaron siempre poco de la vida sin plantear quejas ni exigencias!

¿Qué sentido tiene un paisaje vacío o un pueblo fantasmal? - me pregunto. ¡Dichosos los pinos, que en su soledad, no sienten ni padecen!

¿Y se podrá hacer algo para revertir la despoblación? La zona pinariega necesita gente y ganado para mantener sus bosques. Los defensores del medio rural aseguran que todavía hay forma de salvar a estas zonas rurales, que definen como fábricas de elementos imprescindibles para la vida, como el agua, la calidad del aire, las energías limpias y los alimentos. No auguro buen futuro a los pueblos. La situación para mí es irreversible. Me molesta decirlo. Se han hecho estudios… pero para que revierta habría que cambiar la economía globalizadora actual.

A los políticos pedimos, qué menos, que mantengan los servicios actuales de los pueblos. Todavía pervive la creencia equivocada de que en un pueblo se vive con felicidad y pocos medios. Al revés: se necesitan más recursos que en la ciudad.

 
Pregono y pregono que a vosotros canicosos, peregrinos de la emigración, también se os necesita por vuestras visitas, vuestras compras, vuestras casas que pagan impuestos... por la compañía de vuestros hijos y nietos… Pero no exijáis todos los servicios de los que disfrutáis en la ciudad: mejores fiestas, por ejemplo. Los recursos son los que son aunque todavía estamos en la época de las vacas gordas.

España lleva años volviendo la espalda a este mundo rural mostrando su desdén con la vida del campo. La despoblación no tiene solución, se dirá desde las páginas de Diario de Burgos. Es una tierra que por sí misma es imposible que se regenere. Vivir en un pequeño pueblo, sería un gasto enorme que tendrían que acometer y pagar todos los ciudadanos para que disfrutasen de todos los servicios necesarios de la ciudad. Luchar contra el despoblamiento, decía Diario Burgos, es perder esfuerzos en batallas perdidas.

Hace unos días el Consejero de Empleo de la Junta de Castilla y León presentó un documento con cinco puntos básicos y urgentes para remediar el entuerto: favorecer el envejecimiento activo y saludable; crear entornos favorables para las familias para facilitar la natalidad deseada; generar mayores y mejores oportunidades para los jóvenes; mejorar las condiciones de vida para atraer a nueva población; e impulsar un desarrollo económico y social sostenible del medio rural… Palabras y más palabras de los políticos… La despoblación no les da votos.

Pido para los habitantes de estos pueblos, que los gobiernos apliquen la discriminación positiva y tomen medidas efectivas en materia económica, fiscal y de infraestructuras y que los fondos que destinan en materia de despoblación y envejecimiento se inviertan de forma finalista en los territorios despoblados. Esto para ser efectivo tendría que ser asumido mayoritariamente por las Cortes de Madrid. Y a la Unión Europea solicito que aplique a esta zona medidas ya legisladas en materia de montaña, ruralidad y despoblación… Pero aún así… seguiríamos despoblándonos.

Acabo citando los versos de Antonio Machado:

¡Viva Canicosa!

JESÚS CÁMARA OLALLA
Canicosa, 14 de agosto de 2017

*   *   *
 

Jesús De Pedro San Esteban

Presidente de la Asociación de Jubilados y Pensionistas

Buenas tardes, autoridades, vecinos y vecinas de Canicosa de la Sierra, visitantes, y público en general.

Nuestras primeras palabras son de agradecimiento al Sr. Alcalde y a la Corporación Municipal por honrarnos con la deferencia de ser los pregoneros de estas fiestas, todas las Asociaciones que representamos a la Villa de Canicosa.

Aquí y sin estar formados en Asociaciones legalmente constituidas, siempre se ha actuado y convivido en sociedad y así cuando se hacia la matanza, cuando se iba a abrir huella por las nevadas, cuando se beldaba el trigo; en tantas y tantas ocasiones, nuestros antepasados se unieron para realizar labores y para ello no hacía falta un acta fundacional, ni un libro de actas, ni una convocatoria legal para llamar a estas reuniones. Pero allí se estaba, todos unidos, apoyándonos unos a otros, sin cargos y sin pretextos ni inconvenientes.

Desde aquí queremos agradecer a todos nuestros socios que siempre están ahí, que cuando se les llama acuden y que gracias a ellos se hacen tantas cosas... y se podrían hacer más, pero a veces por falta de presupuesto, por problemas ajenos a nosotros o por impedimentos de cualquier tipo no se hacen aunque esperamos seguir promoviendo cosas por y para nuestro pueblo, para nuestros vecinos, y para los que nos visitan. A todos y a todas, MUCHAS GRACIAS.

Queremos pedir a los que no estáis asociados que entréis a participar en las Asociaciones, porque la unión hace la fuerza y porque si todos vamos unidos, las cosas saldrán mejor, más rápido y no nos costará tanto a los que ya lo hacemos. Y este es un llamamiento para todos, residentes y los que no lo son. VUESTRO APOYO ES IMPORTANTE.

Desde esta unión, esta armonía, amistad y cariño queremos desearos a todos que paséis unas FELICES FIESTAS, QUE DISFRUTEMOS EN UNIÓN DE ELLAS Y QUE HONREMOS A LA VIRGEN DEL CARRASCAL Y A SAN ROQUE.

ASOCIACIÓN DE JUBILADOS Y PENSIONISTAS "VILLA DE CANICOSA"

ASOCIACIÓN DE MUJERES "EL CARRASCAL'

ASOCIACIÓN DE PADRES Y MADRES "SAN ESTEBAN"

ASOCIACIÓN CULTURAL "ALTA SIERRA PELENDONA"

Queridos canicosos y canicosas, Señor Alcalde y Corporación, gente que se acerca durante estos días para compartir la alegría de las fiestas que vamos a vivir:

Deseo dar la bienvenida y expresar mi gratitud a todos cuantos las hacéis posibles, por el inmenso honor que supone para mí dar el pregón ante un público tan entrañable como es la gente de mi pueblo; porque este es el mejor tesoro que tiene Canicosa: su gente, que siempre acoge con los brazos abiertos a cuantos se acercan, y durante las fiestas, el pueblo se convierte en lugar de encuentro, recibiendo a la familia y abrazando a esos amigos que sólo vemos de año en año, sin dejar de recordar a los que ya no están con nosotros.

He tenido una gran oportunidad al poder contribuir modestamente con mi trabajo en la escuela, a la formación de los niños que viven aquí, que son los hijos del pueblo. Implicarme en su educación ha sido una apasionante aventura que siempre recordaré con cariño, porque han sido cuatro años recorriendo caminos de ilusión, compartiendo sueños, proyectos e inquietudes, en los que he intentado dar respuestas alentadoras, fomentando valores de participación y solidaridad.

Todos podemos colaborar aportando nuestro granito de arena, para que estos niños del presente encuentren un mundo lleno de posibilidades y recursos, para que llenen las calles de alegría, y el día de mañana, se sientan orgullosos de tener aquí sus raíces. Ellos son el motor de cambio que necesitamos para que Canicosa no se vaya apagando, y al igual que nuestros mayores estoy segura que serán los mas fieles transmisores de las costumbres y tradiciones de su pueblo.

Hoy nos reunimos para iniciar nuestras fiestas y, como pregonera de este año 2008, quiero animar a la gente a que participe en las actividades que se han organizado con tanto esfuerzo, implicándonos todos para que no decaiga el ritmo ni la ilusión; tratemos de olvidar nuestros problemas, colaboremos para mantener vivo nuestro pueblo, hagamos de Canicosa un lugar donde todos tengan cabida, bailemos y brindemos por estar juntos de nuevo.

Os deseo de todo corazón que disfrutéis de las fiestas.

¡VIVA CANICOSA!

¡VIVAN LA VIRGEN Y SAN ROQUE!

¡VIVAN LAS FIESTAS!

ROCÍO DEL VAL CAMPO

CANICOSOS, PAISANOS, GENTES DE OTRAS TIERRAS, SR. ALCALDE:

¡Qué gran honor para mí dirigirme a todos ustedes en este día! Me hace recordar un 10 de Agosto del 1960 en que me despedí de estas tierras duras y hermosas; estas tierras serranas, de hombres y mujeres valientes y trabajadores. sin importar cuán dura pudiera ser la faena y que jugada nos pudiera guardar la naturaleza. Ese día. me convertí en un emigrante más, que deja su patria, su pueblo y su corazón en él, para buscar nuevos destinos sin saber si algún día regresaría...

Hoy tengo una vida en un lindo país, la República Dominicana, que me abrió sus brazos; gente que por el solo hecho de ser español me abrió cada puerta que toqué con cariño y respeto. Además, salí premiado: el amor de una maravillosa mujer y una hermosa familia. Esta familia que también quiere venir todos los años porque dicen que ¡mejor que Canicosa no hay otra cosa! Con su gente alegre, humilde y bondadosa, gente de trabajo, con enseñanzas ricas, honradez, perseverancia, responsabilidad y fe, tan cierta y tan nuestra como San Roque y la Virgen del Carrascal.

Hoy estoy aquí en mi pueblo y el vuestro. Hoy estamos aquí como cada agosto, dejando libre ese júbilo que secretamente guardamos todo el año, que se va despertando cuando nos vamos acercando, cuando respiramos el aire del monte, de los pinares, cuando recibimos ese abrazo fuerte, ese espaldarazo de compueblano, ese saludo de amigo y vecino... Es entonces cuando brotan los recuerdos, las travesuras compartidas... ¡Cuantas manzanas le comimos a Don Salvador y cuantos membrillos al Tío Daniel! Viene a mi mente ese 17 de agosto del 1958 cuando la pandilla El Trueno lanzamos a mi primo Martín Pascual, que en paz descanse, al pilón del Barrio de La Virgen, y otras travesuras más que es mejor no mencionar...

Por eso hoy les exhorto a todos, a los más jóvenes, a los que ya no lo somos, a los que partimos y siempre volvemos, a los que vienen de otras tierras, a que unidos celebremos con entusiasmo y alegría estas fiestas, nuestras fiestas, las mejores de los pinares, las fiestas de Canicosa.

¡Adelante Canicosa! ¡Viva San Roque! ¡Viva Nuestra Señora del Carrasca!!

                                                                                               Felipe Benito San Esteban

Queridos paisanos y vecinos de Canicosa:

Es para mí un orgullo y un honor dirigirme a todos vosotros como pregonero y portavoz de las personas mayores en estas fiestas en honor de nuestra Señora del Carrascal y de San Roque.

Agradezco al alcalde Ramiro, su ofrecimiento en este año del centenario de mi padre Domingo de Miguel López, nacido en Canicosa de la Sierra el 2 de Julio de 1906. Bienvenidos a los que regresan de otros lugares para disfrutar lo que secretamente han ansiado todo un año: encontrarse con los suyos y consigo mismo. Porque son las raices que nos hacen ser como somos y las que nos identifican allá dónde vamos.

Algo debe tener Canicosa para que todos regresemos cada año. Serán los pinares, el encanto del monte, el clima, sus gentes o las vivencias de la infancia lo que nos hechiza y nos hace volver.

El máximo valor de esta tierra es su gente. Gente de corazón, noble y espíritu tenaz. Me gustaría deshacerme en elogios, por esta insólita raza de hombres y mujeres, que como mi padre han dedicado su vida al trabajo, para sacar adelante a su familia, teniendo que trabajar muy duro en las faenas propias de nuestra tierra.

Tenemos en el recuerdo, las imágenes de nuestros mayores transportando la madera con la yunta de bueyes, en las eras trillando el escaso cereal que se cosechaba, y segando la hierba de tie­rra y prados para alimentar durante los la largos meses de invierno a los animales que casi todas las familias tenían para poder subsistir.

¡Qué dura ha sido la vida de nuestros mayores!

Pero gracias a ellos y a sus grandes sacrificios hoy podemos disfrutar de bienestar y prosperidad en nuestras familias. Por ello, debemos compensar ese esfuerzo y dedicación con respeto, con cariño con constante atención todo el tiempo que permanezcan con nosotros.

Estos hombres y mujeres deben ser el espejo dónde el esfuerzo y el trabajo colectivo han sido la base de nuestro presente.

Debemos inculcar en nuestros jóvenes la admiración y el respeto por nuestros mayores para que siguiendo sus pasos, sepan construir un futuro basado en la nobleza, la tenacidad y el sacrificio.

En honor a los mayores les dedico estos versos:

A los hombres y mujeres

De esta, mi tierra serrana,

Hoy les quiero agradecer

La dedicación y entrega

Que a lo largo de sus vidas,

Nos han podido ofrecer

Su vida fue transcurriendo

Entre el trabajo y la casa,

Cuidado de la familia

Para que nada faltara,

Eran tiempos de escasez.

Toda ayuda era muy poca

Pues había que alimentar,

Alimentar muchas bocas

Pocos eran los recursos,

Muchos los sacrificios

Pero con tenacidad

Y nobleza singular,

Han sabido hasta hoy llegar

Y podemos demostrar su

Bravura y entereza.

Por eso, jóvenes de hoy

Miraos en sus espejos

Y así podréis aprender

Que es de sabios hacer hoy

Lo que ellos hicieron ayer.

Es hora de disfrutar de unas nuevas fiestas y venerar a Nuestra Señora del Carrascal y a San Roque.

Por ello Canicosa se engalana de luces, fuegos artificiales, alegría de las peñas Y nos ofrece el dulce néctar de la diversión y el júbilo.

¡Aprovechamos estos días de alegría y alboroto!

Este pregón de fiestas va rayando su fin, pero no me gustaría despedirme sin mostrar mi gratitud:

Al ayuntamiento que ha brindado la posibilidad de expresarme hoy aquí pensando en los mayores.

A todos vosotros que escucháis y que como yo sentís la admiración por esta tierra y su gente.

¡VIVA CANICOSA ¡VIVA LA VIRGEN! ¡VIVA SAN ROQUE!

Domingo De Miguel López

Amigos de Canicosa, autoridades, vecinos de esta comarca, jóvenes y mayores, sed todos bienvenidos a estas fiestas que ahora estrenamos y que tengo el honor de comenzar a pregonar.

Por estas fechas veraniegas llegan las esperadas fiestas de Nuestra Señora del Carrascal y San Roque en esta tierra de importancia histórica, hombres ilustres y tradición maderera y noble, que por unos días transformará su ambiente entrañable y angosto, en jornadas de fiesta y alegría.

Estamos ya en verano que en Canicosa tiene un significado especial de encuentros y reencuentros entre amigos y vecinos, que tienen en esta tierra su punto de referencia entorno a los barrios de la Virgen, San Roque y Manzanares que dan vida a tan ilustre municipio, y que arranca en una fecha tan señalada como es la del día de Ntra. Sra. Del Carrascal.

Y es en estos días de alegría cuando los vecinos y los hijos de Canicosa podéis contemplar la apuesta por un Municipio con futuro, que esta construyendo con esfuerzo un futuro a través de nuevos servicios, siendo capaz de albergar tradición con moderniad haciendo convivir el desarrollo turístico y cultural con inversiones que dinamizan la comarca, y que no os quepa duda que gracias al tesón de vuestros representantes seguiréis desarrollando.

Esta tierra tiene una deuda con su memoria histórica, y en torno a la Ermita de la Virgen del Carrascal, está siendo capaz de reivindicar con mucho esfuerzo la importancia de llamarse Canicosa y llevar el noble apellido serrano que con orgullo os contempla, por eso en estos días de fiesta, abrir vuestras calles para que todos podamos contemplar la hospitalidad que desde vuestros tres ríos y vuestros bos­ques, preside vuestra grandeza.

Y son los árboles, vuestros pinos, robles y bosques los que debéis preservar en estos tiempos en los que asustados presenciamos año tras año las terribles presas que se cobra el fuego en nuestro mayor patrimonio medio ambiental, por ello os animo a seguir preservando todavía con más esfuerzo la protección de los bosques que todos disfrutamos, y que año tras año nos brindáis al resto de amigos que os venimos a visitar.

No podemos olvidarnos en este ambiente festivo de los vecinos de Canicosa que todo el año disfrutan de sus encantos, y en especial los jóvenes a los que envío un cordial abrazo y les animo a que participen de una tierra con oportunidades que necesita de vos­otros y de vuestra implicación como dinamizadores de la misma.

Por que sois los jóvenes el presente y el futuro del pueblo y dependerá de vosotros lo que esta comarca sea el día de mañana, esta en vuestra mano si dentro de unos años os vais a lamentar por las oportunidades perdidas o en cambio os felicitaran por el trabajo bien hecho en favor de vuestros hijos, y por eso os animo a tener siempre presente a Canicosa, como hoy la tienen tantos amigos de esta tierra. Un saludo y aprecio muy especial para la juventud tan bien representada en estas fiestas.

Estos son días de alegría en los que ya os anuncio estará permitido realizar algún pequeño exceso, una licencia esta que me atribuyo en mi condición de pregonero, pero que está condicionada por la moderación oportuna que debe imperar en todo momento respetando, a propios y extraños, a grandes y a pequeños.

Canicosa abre sus puertas de par en par, durante estos días, para recibir a todos los que se quieran acercar a esta milenaria tierra, y todo ello con la única condición de olvidar los quehaceres y problemas cotidianos y la obligación, para todos los que llegan hasta aquí, de aportar buen humor, derrochar alegría y ostentar amistad.

Y voy finalizando ya estas palabras que abren las fiestas mayores, pero no puedo aca­bar sin expresar mi agradecimiento más sincero al Excmo. Ayuntamiento de Canicosa, con su alcalde Ramiro a la cabeza, que tan amablemente me ha concedido el honor de ser vuestro pregonero en estas fiestas de Nuestra Señora, y que representa a un Consistorio que trabaja en el día a día para hacer un pueblo más moderno, con mejores infraestructuras y por mantener en las mejores condiciones el legado cultural que nos dejaron nuestros mayores. Agosto, los bosques, y la localidad de Canicosa, son una conjunción perfecta que invita a la alegría yola diversión. Calle ya el pregonero y comience la fiesta por todos los rincones, pero no sin antes cumplir con la obligación de rendir pleitesía a esta tierra con un,

¡VIVA CANICOSA! ¡VIVA LA VIRGEN! ¡VIVA SAN ROQUE! ¡VIVAN LAS FIESTAS!

Borja Suárez Pedrosa