En las estribaciones meridionales de los Picos de
Urbión y de Ia Sª de la Demanda, en la cabecera del Arlanza y en una zona
cargada de historia y de leyendas conocida como «Tierra de Pinares»
se encuentra la Villa de Canicosa de la Sierra.
Cerca del paraje conocido como «El Piquillo», al lado de la
carretera que conduce a Navaleno y con vistas al pueblo hay una envejecida
dehesa de rebollo con ejemplares de cerca de 2 m de diámetro, en la que
nos encontramos este insólito modelo de convivencia.
En
la oquedad producida por la Pudrición provocada por antiguas podas, cayó,
germinó
y enraizó una semilla de pino albar, que a duras penas fue desarrollándose
al principio en busca de la luz y del suelo mineral que asegurara su
futuro desarrollo.
El
pino, más joven y vigoroso que el añoso roble, va poco a poco acelerando
la decrepitud del árbol que le acogió en su seno y le dio cobijo y
sustento en momentos más difíciles en
los que el ganado hubiera podido
impedir que el «pinocho» prosperara.
Por
los síntomas de decadencia mencionados, es aconsejable que el que quiera
disfrutar de la presencia en vivo de este capricho de la naturaleza se de
prisa en visitarlo.
FICHA TÉCNICA
Denominación:
Pino Roble de Canicosa.
Término
municipal: Canicosa de la Sierra (Burgos).
Paraje:
Piquillo-La Cuesta.
Propietario:
Comunal.
Estado de
conservación: En decadencia.
Medidas de
protección: Ninguna.
Altitud:1.200m.
Dimensiones:
Altura:
Del pino: 15 m.
Del roble:12,5m.
Circunferencias:
(normal) del
roble: 3,40 m.
(A 2,9m de
altura) del pino: 2,00m.
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José Cuesta Cuesta
Revista
MONTES
N.°
36 – 1994
Página
29
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